¿En qué tipo de universidad estudiaste, y vives independientemente?

miércoles, 30 de diciembre de 2009

Los pequeños placeres de vivir independientemente 3: El LAN party


Cuando uno es soltero, la vida es para divertirse, según lo que uno considere entretenido, y obviamente sin hacerle daño a nadie. Y si bien muchos esperarían que el elogio sería al sexo, drogas y rock and roll, acá haremos algo diferente. Elogiaremos el LAN party.

El LAN party consiste en armar una LAN (Local Area Network) con el fin de jugar juegos en red. Para ello, todos los participantes han de tener una laptop o una computadora de escritorio. Idealmente, si es que hay computadoras de escritorio involucradas, estas deberían ser las de los dueños de casa, para evitar un transporte complicado e innecesario, y los invitados estarían todos equipados con portátiles.

Otro hardware necesario para poder hacer esto factible, sería un router. El que nos vino con el triple play Telmex incluye wi-fi, de manera que las computadoras que tienen esa capacidad pueden conectarse sin cables. Perfecto, una complicación menos. Ahora, la configuración misma del LAN tiene su truco, y en realidad merecería una entrada en sí misma, probablemente en un blog de tecnología.

La cuestión que nos interesaría acá son las ventajas de hacer el LAN party viviendo uno solo. Decididamente, varias personas, cada una con una computadora, sea esta de escritorio o portátil, ocuparían una cantidad de espacio significativo, y en especial de superficies planas (es decir, se utilizarán muchas de las mesas disponibles en la casa).

Otra cuestión es que un LAN party puede ser bastante bullicioso. Uno juega juegos cooperativos y competitivos, y en cualquier caso se requiere considerable coordinación. Y en un contexto de este tipo, en que uno está bajo ataque de zombies, elfos de los bosques o marines imperialistas, estas pueden ser de alto volumen e intensidad. Como un partido de fútbol en casa. Las recriminaciones, gritos y reclamos pueden volar de lado a lado.

Finalmente, ya que en este tipo de juegos se puede recurrir a formar dos equipos para luchar entre sí, se puede requerir más de un solo ambiente de la casa. Esto, para que cada grupo tenga un espacio donde puedan coordinar sin que el enemigo pueda oírlos.

En general, por todas las cuestiones antedichas, no siempre es factible poder realizar esta bulliciosa y obstaculizante actividad en la casa de los padres. Pero cuando se vive solo, la vivienda es el castillo, y uno no responde ante nadie. LAN party de doce horas seguidas? Normalazo.

domingo, 27 de diciembre de 2009

Hijita de mamá y papá



No se si les habrá pasado pero más de una vez he salido con alguna amiga mayor que yo, es decir alrededor de los treinta y en teoría independiente económicamente, y en algún momento decide llamara a su "mami" (si es que no es su señora madre la primera en llamar) según que para avisar en su casa que va a llegar tarde aunque he observado que las conversaciones pueden lindar más con la solicitud de permiso para llegar tarde. Ante esto suelo mostrar mi extrañeza ya que eso de pedir permiso o avisar a alguien de mis horarios me resulta ajeno o impensable en mis actuales circunstancias, lo que obtengo suele ser una suerte de explicación del tipo "no es que tenga que pedir permiso es para que no se preocupen", bueno si no quieren que se preocupen mejor vivan por su cuenta y así nadie se va a preocupar por la hora en que llegan a casa (si es que llegan).

Hace poco tuve una reunión con gente del trabajo por el inevitable intercambio de regalos y resulta que el personal femenino representa como el 80% del total por lo cual pude observar que las más jóvenes tenían que ir a su casa para que sus padres no se preocupen y las mayores de base tres eran solicitadas por sus parejas (esposo, conviviente, etc). Veo que si ya es poco común ver hombres que salgan de casa de sus padres en sus veintes para vivir por su cuenta es aún más difícil encontrar mujeres en dicha situación a pesar que en la actualidad ellas tiene acceso a los mismos puestos y oportunidades que los hombres, es decir, imagino que hay igual cantidad de profesionales de ambos sexos con la capacidad de vivir independientemente.

Postulo un par de razones: ¿puede ser que al ser el hijo de la familia promedio tan hijito de mamá resulta que las hijas también son hijitas de mamá con el añadido de ser hijitas de papá?, creo no equivocarme al decir que para el padre es más fácil dejar ir al hijo varón ("el se sabe defender") que a la hija mujer ("¡le puede pasar cualquier cosa!). Además he observado que algunas hijas esperan poder seguir viviendo con sus padres una vez casadas y con hijos a diferencia de los hombres que tienden más a desear un hogar independiente...pobres padres.

Desde aquí hago notar a las lectoras que este blog no está dirigido solo para hombres como quizás pueda parecer en algunas ocasiones, me parece inevitable dado que los autores somos del género masculino, después de todo trás muchos razonamientos logré convencer a una de mis amigas de vivir por su cuenta una vez que se case y abandonar el proyecto "tercer piso en casa de papá".

miércoles, 23 de diciembre de 2009

Las nenas viven con sus mamitas 2: Howard Wolowitz

Es curioso cómo los latinoamericanos ven a personajes como Howard Wolowitz. Normalmente será descrito como "el que se cree galán", "el que inventó el water espacial", "el chato", "el que tiene peinado de Beatle", incluso "el judío", etc. Hay, sin embargo, un rasgo que los escritores consideran como clave, pero ante el cual los latinoamericanos están completamente ciegos.

Wolowitz vive con su mamita.

Veamos:
"Howard is distinguished for lacking a doctor's degree, for still living with his mother, and for believing himself to be a "ladies' man"." "He still lives with his mother, who is overly oblivious to his accomplishments as an engineer." (Wikipedia)

Y este definitivamente uno de sus rasgos principales. Da la impresión de que la mitad de los chistes hechos a expensas de él son sobre sus gileadas monses, y la otra del hecho de que vive con su mamita. Al respecto cabe preguntarse cómo es entendido este programa, ya que lo que los escritores quieren decir puede ser muy diferente de lo que el público entiende. Todas esas instancias en las que los guionistas tienen la intención de que el público reaccione "toma! por ser un perdedor que vive con su mamita" en latinoamérica más bien obtendrían la de "pobre chico, por qué lo molestan tanto? Si es tan normal vivir con la mamita".

Hay un ritual que tienen muchos grupos de pares, que es la de intentar asignarle a cada uno un personaje de "The Big Bang Theory" según a cual se parezcan más. Intenten proponer que se tome en cuenta la variable de vivir con la mamita para determinar quién es o no es Wolowitz y verán a lo que me refiero. Muchos chistes de "The Big Bang Theory" caen en oídos sordos acá.


domingo, 20 de diciembre de 2009

El Punto de Reunión


Finalmente estoy de vacaciones y la última semana me ha servido para tomar real consciencia de que la casa del amigo que vive solo es el punto de reunión ideal para todos los que viven con sus padres, es lo que un amigo mío llamaba "territorio liberado" para referirse a la casa de alguien cuyos padres se encontraban de viaje, es decir un lugar donde uno puede juntarse con las amistades sin temor a importunar a los demás habitantes de la casa y es que el problema con cualquier reunión suele ser el ruido que esta genera y a menos que se tenga padres y hermanos comprensivos o sordos a veces no queda otra más que bajarle al volumen.

Como decía previamente he tenidoo la suerte de tener visitas de amigos todos los días de la semana que termina (hay que sacarle el jugo a las vacaciones) y uno de esos días me di cuenta que estaba haciendo tremenda bulla a las 3 de la mañana jugando en el Xbox con un amigo y casi por instinto le bajé el volumen a la TV y caí en la cuenta que en realidad no había razón para hacerlo ya que no había nadie que se fuera a quejar por el asunto. Tampoco es que haya sido un escandaloso cuando vivía con mis padres pero es un alivio saber que no voy a impedir que alguien duerma tranquilo y que vaya al trabajo con sueño. Así que debo decir que este sería solo otro pequeño aliciente para todos aquellos que todavía dudan en mudarse.

miércoles, 16 de diciembre de 2009

A quién le pertenece la cochera?



En una conversación reciente con unos amigos, salió a relucir el tema de la cochera de la casa de mis padres. Como sabrán quienes hayan leído este blog, yo sostengo la idea de que después de graduarse de la universidad y obtenido un trabajo, uno ya no vive con los padres, sino que está alojado ahí. Yo me mudé de la casa de mis padres hace ya un par de años, pero mi hermana sigue ahí, a pesar de ya haberse graduado y teniendo un trabajo bien pagado.

Como soy de la teoría de que ella ahora está alojada ahí por acto de gracia de mis padres, no porque ella tenga derecho alguno a estar ahí, considero que en esa casa, ella no tiene ningún derecho por encima de los míos. Los dos somos invitados cuando estamos ahí, con la única diferencia de que ella duerme ahí.

La casa tiene una cochera con espacio para dos autos. Mis padres tienen un auto que usan en una de las casillas, y mi hermana suele estacionar en el otro. Pero cuando voy de visita y mi hermana no está, yo me estaciono en dicha casilla. Y cuando llega ella, y comenta al respecto, yo le contesto que yo tengo tanto derecho a usar el espacio de invitados como ella. Alguna vez me ha reclamado que desaloje "su" casilla, y yo sencillamente me he rehusado a hacerlo. Cuando ya se hacía tarde, yo me iba, y ella misma tenía que guardar su auto.

Al comentar yo esta situación a mis interlocutores, se hizo una encuesta impromptu al respecto. Éramos cuatro: dos que vivimos por cuenta propia, y dos que viven con sus mamitas. Previsiblemente, los dos que viven por cuenta propia consideraron que eso estuvo perfectamente bien hecho, mientras que quienes viven con sus mamitas consideraron que esa cochera sí le pertenece a ella. Qué sorpresa.

domingo, 13 de diciembre de 2009

Feliz Navidad



Christmas MySpace Funny Pictures


Probablemente el lector de esta entrada tenga el 25 de diciembre por una fecha especial y celebre la navidad, este no es mi caso ya que soy ateo y para efectos prácticos estas fechas son como cualquier otro día, aunque también hay muchos que la celebran sin ser cristianos observantes pero esta discusión no viene al caso. Lo que quiero expresar es que al vivir solo uno pasa a crear sus propias costumbres y fechas especiales, que pueden coincidir o no con las heredadas del hogar paterno, en mi caso me siento aliviado de no sentir la necesidad de adornar, poner el árbol navideño o armar un nacimiento; supongo a su vez que debe ser lo contrario para la persona independiente que gusta de la navidad ya que tiene la oportunidad de arreglar su casa con los motivos navideños que mejor le plazcan.

Tampoco quiero que se me confunda con el Grinch, aprovecho la navidad para pasarlo con mis padres, que si son cristianos, y lo tomo más como una oportunidad de pasarlo en familia; sin embargo veo a algunos amigos y conocidos que por esta época andan tristes, preocupados o simplemente de mal humor, parece que la navidad les impone exigencias personales que no siempre están gustosos a afrontar, afortunadamente yo no lo siento así por mi no creencia reforzada al vivir lejos de mi familia, quizás yo no siento la presión que tienen otros por hacer de esta fecha algo especial.

Así que estimado lector quiero decirle que se tome las cosas con calma en estos días después de todo nadie lo obliga a poner un árbol de navidad, si lo va a hacer hágalo con gusto. Solo me queda desear un ¡feliz todo! y así no me olvido de saludar por alguna de las tantas festividades de las cuales dificilmente celebre alguna.

miércoles, 9 de diciembre de 2009

Nuevo banner!

Viviendo Solo se complace de anunciar la inauguración de su nuevo banner. Por favor, siéntanse libres de promocionar el blog.

Como adicional, incluimos acá la entrada de otro blog, como para que puedan ustedes ver cómo los independientes pensamos de manera similar y des-nenizada. Creo que coincidimos en mucho, excepto quizá la parte en que él tiene que recurrir a su mamita a arreglarle la vida.


VIVIENDO SOLO: EL CAOS INICIAL
By peregrinoinmovil
Algo que muchos añoramos desde nuestra adolescencia y posterior juventud es la independencia, la posibilidad de vivir fuera del techo de los padres, del yugo impuesto por el lar familiar. Para ello, uno se dedica, a penas puede y quiere, a encontrar un lugar personal que puedas empezar a llamar hogar; llegado el momento inicias la búsqueda a conciencia, para encontrar algo que se acomode tanto a los requerimientos personales como al presupuesto, lo encuentras, se produce la mudanza y se logra la ansiada independencia. Colorín colorado, ya está todo listo, eres libre e independiente……. error.

Cuando llegas contento a tu casa y pasa la primera semana de locura mientras intentas acomodar todas tus cosas sientes la adrenalina, planeas los tonos con los amigos, los encuentros amorosos que no deberán llevarse a cabo en un hotel, la imaginación vuela libre e independiente de cualquier razón lógica, no hay límites, la vida será una fiesta permanente e inolvidable; y sigues dándote cuerda, ya no tendrás que guardar la ropa, ni arreglar nada, piensas que puedes vivir como si fuera una película gringa de bajo presupuesto, sex, drugs and rock & roll; esto hasta que la realidad te mete un martillazo en la cabeza.

Pasada la emoción empieza la verdad, descubres que los gnomos y elfos que arreglaban tu cuarto, tendían tu cama, lavaban, doblaban y planchaban tu ropita , tenían tu comidita lista y guardada en el microondas se negaron rotundamente a venir contigo y prefirieron quedarse en la casa de tus padres (quizás por que sea mas cómodo para ellos o por que intuyeron el desastre) así que en cosa de semanas, luego de probar las mieles de la libertad (que es un truco barato que solamente sirve para armar revoluciones), tu departamento es una zona de guerra, no hay platos limpios (que te regalo tu mami con mucho cariño), no tienes cocina ni ollas para cocinar y no puedes seguir a punta de pan con jamón y queso (aunque sean buenazos), no hay ropita planchada y mucho menos limpia y tu cama siempre está destendida (cosa que en lo personal odio) e increíblemente empiezas a entrar en trompo.

Asi es, entrar a tu casa se vuelve un choque cultural, por que ahí no vives tu sino que es un campamento de refugiados de guerra (de una guerra de prestancia por que la ropa tirada en los muebles es de marca obvio); así que pretendes tomar las riendas del desastre e intentas hacer algo, pero el desafío es monumental, y empiezas a recordar la ternura permanente de la madre, los consejos sabios y calibrados del padre, el amor innegable y la relación perfecta con los hermanos y cuestionas, sin mas, la decisión mas estúpida que has tomado; llegado ese punto solamente queda una cosa valiente y madura por hacer, llamar desesperadamente a la madre en busca de consuelo y ayuda.

Yo llegué a ese punto por partes, fueron episodios intermitentes de desesperación que traté de controlar de la manera mas propia que pude, el orgullo que le dicen, intenté manejar el desastre, lo juro, me planifiqué, compre cosas para limpiar la casa, hice yoga y meditación para encontrar la voluntad necesaria para la tarea y hasta pedí la ayuda de los padrinos mágicos, pero nada, no pude, caí en un pozo profundo del que salí cuando mi abnegada madre puso manos a la obra y me solucionó los problemas administrativos en los que andaba; no pues, vivir solo no es un paseo por el parque.

Hoy le debo la cordura al control personal que me impide desordenar mas de lo que puedo ordenar, a las ganas de mantener todo casi en su sitio y a la invalorable presencia de V, quien se encarga de dejar, dos veces por semana, la casa en un estado presentable.

Me desconecto.

Adeu…

domingo, 6 de diciembre de 2009

La receta para la independencia...según Interbank

Antes que nada agradezco al lector brian por enviar un comentario sobre el comercial de Interbank que se puede ver líneas abajo, veo poca o nada televisión y me había perdido esta propaganda que procedo a comentar.



Para empezar a primera vista se diría que Mateo, el protagonista del comercial, es un vago y comodón que vive a expensas de sus padres, bastante controladores por cierto, sin embargo en segunda vista se puede observar que en realidad Mateo está aburrido de vivir con sus padres y desea vivir por su cuenta, aquí es donde entra el banco para ayudarlo en su cometido mediante un recurso deus ex machina. Sin embargo acá veo algo interesante, la propaganda sugiere que hay muchos jóvenes y adultos con trabajo que desean dejar de vivir con sus padres, en la experiencia de este blog esto es debatible, pero la forma de lograrlo no es mediante esfuerzo y perseverancia sino con un sorteo "millonario", esto no lo pongo en duda después de observar a jóvenes mudarse gracias al patrocinio paterno (entiéndase alquiler pagado por papá y mamá) o no hacerlo porque no pueden solventar una vida como la que llevan con los padres (llámese sin cuentas que pagar a fin de mes).

Sólo puedo decir que si hay algún lector sintiéndose como Mateo que no espere más y que se proyecte con miras a la independencia pero sin esperar una vida como la que provee la casa paterna (o la que promete Interbank con carro incluído), las recompensas personales que se obtienen valen eso y más.

miércoles, 2 de diciembre de 2009

¡Qué tal concha! Consideraciones teóricas



La sección "¡Qué tal concha!" consiste en críticas -nominalmente constructivas- al estilo de vida de algunos nenas que viven con sus mamitas. Básicamente consiste en la sátira de los lujos que lo nenas se autoprodigan con el dinero que se ahorran sanguijueleando a sus madres. Cabe, sin embargo, establecer algunos esbozos teóricos que enmarcan esta categorización.

En Viviendo Solo consideramos que existen casos legítimos de vivir con la mamita. La discapacidad, por ejemplo. La ceguera, la parálisis o el coma son todas condiciones que pueden precluir -algunos más que otros- la posibilidad de vivir como adulto independiente. No siendo tan radicales, también puede ameritar vivir con la mamita si uno realmente tiene un ingreso tan exiguo que no puede sobrevivir por su cuenta. Si bien no hemos establecido cuál es el mínimo que se necesita para vivir independientemente, aunque de hecho hay gente que cría familias enteras con 600 soles o menos, sí hemos establecido que a partir de los S/. 1,100 para arriba uno ya no puede reclamar que "no le alcanza" (esto es a menos que uno se crea un hidalgo picaresco del siglo XVII o algo así, que "merece" que el mundo lo mantenga).

Otra posibilidad es que uno viva con su mamita para poder ir ahorrando. ¿Ahorrando para qué? Pues para comprar los enseres básico para mudarse y vivir como adulto. Cama, platos, cubiertos, sillas, refrigeradora, microondas, etc. podrían ser algunos de los objetos que uno podría necesitar antes de volverse adulto. En este caso, entonces, la vida con la mamita tendría un fin determinado y estaría caracterizado por su condición transitoria. Uno ya no "vive" ahí, sino está "alojado".

Y ahora es que entra el elemento del ¡Qué tal concha! Esto se aplica cuando el nena empieza a adquirir objetos de lujo con el dinero ahorrado. Ya hemos visto el caso de los automóviles. Lo que cabe analizar es si todo lujo comprado por el nena es una concha. Para esto, propongo un criterio de proporcionalidad. Después de todo, si eres hijo de Bill Gates vives con tu mamita, y ganas S/. 1,500 al mes, difícilmente podría tildarse de concha el irse de viaje a Huacho, ¿no?

Por ello, hay que comparar el ingreso del nena con el de la familia y sacar alguna proporionalidad. Si la familia gana mucho más que el nena, entonces no estaría tan mal que este se de unos lujos con la plata que ahorra viviendo con la mamita. En cambio, si el nena gana más que la familia, y encima vive con la mamita, con lo cual ahorra para darse más lujos, eso sí estaría mal.

Entonces, a la hora de analizar lujos (autos, motos, viajes, televisores plasma, casas en la playa, etc.) comprados o alquilados con el dinero ahorrado por vivir con la mamita, la pregunta que tendría que hacerse el nena es la siguiente: "¿Puede mi mamita darse el mismo lujo con la misma facilidad que yo?" Si la respuesta es afirmativa, mal que bien, el nena puede gastar con la conciencia limpia.

En cambio, si la respuesta es negativa, el mundo entero -y Viviendo Solo- dirán a viva voz: ¡QUÉ TAL CONCHA!